Por muchos es conocido y ha trascendido en la historia que el tercer califa de Córdoba, el heredero de Al-Hakam II, es Hisham II, que con apenas once años obtendría el título pero se establecería una regencia por la que Almanzor tomaría el mando.
Aun cumpliendo la mayoría de edad, Hisham nunca ejercería como verdadero califa y tendría un papel más próximo a califa florero que a ejecutor del poder que le correspondía. Tal fue la influencia de Almanzor y tan bien jugó sus cartas, que podemos decir que Hisham sería el gobernante más pasivo que al-Ándalus tuvo en todo su periodo de duración.
Yo no lo culparía directamente a él, pienso que habría que ponerse en su lugar. Desde niño adoctrinado por un hombre que no era su padre, pero que lo estaba criando, sin influencia ni educación política que le propiciara una buena formación y criterio propio. ¿Qué opciones tenía? Se convierte así en un verdadero peón real, con el que Almanzor jugó una excelente partida.
Pero, todo esto podría haber sido diferente, el destino, una vez más, dio un revés que hizo que nuestra historia sea la que es. Todo lo que hemos contado hasta ahora es más conocido, pero no todo el mundo sabe que Hisham tuvo un hermano mayor.
Al-Hakam y Subh Walad, su favorita, tuvieron un primer hijo, Abd ar-Raḥman. Destinado a ser el tercer califa de Córdoba bajo el nombre de Abd ar-Raḥman IV, no pasaría de la tierna infancia dado a su prematura muerte con ocho años de edad.
Muchas son las versiones que se escuchan de esta muerte. Yo compartiré la que, para mí, más peso tiene hoy en día:
Se cuenta que durante el verano de 970, los niños estaban tomando un baño refrescante en el Guadalquivir, en zona privada y protegidos por la guardia. No sé si habéis venido en verano a Córdoba pero el calor es insufrible y no sería muy diferente por aquel entonces. Debido a las altas temperaturas el primogénito sufriría un golpe de calor, y pasando algunos días en cama, las fiebres provocadas por la insolación acabarían con su corta vida. De este modo Hisham, el segundo hijo, pasaría a primera línea de sucesión.
¿Fue lo de Hisham azar, destino, suerte, casualidad? Si su hermano hubiera vivido otra sería nuestra historia. Fuera como fuera muchos pueden decir que fue califa, o no, pero de rebote.
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