Guitarras, pitos, bombos y platillos suenan tímidos tras las ventanas y puertas cerradas de los locales de ensayo cuando vamos paseando por los barrios viejos de Córdoba. Estamos en la recta final, poniendo las gargantas a punto para el certamen que como cada año tiene lugar en el Gran Teatro de la ciudad, originalmente en el Teatro Góngora.
Pero resulta curioso indagar en la historia de esta celebración, ya que hay historiadores que la sitúan hace aproximadamente 5000 años en tierras sumerias, en el extremo opuesto del Mediterráneo. Pero sin embargo, tal y como lo entendemos hoy, es una fiesta de tradición pagana asociada a las fiestas romanas que se hacían en honor al dios Saturno, donde lo que primaba era la diversión sin restricciones, de ahí que algunos para preservar el anonimato optaran por pintarse la cara y disfrazarse. No obstante, con la llegada del cristianismo cuando empezara a llamarse carnaval, una palabra que etimológicamente significa “abandonar la carne” (procede del latín carne levare) en alusión a la obligatoriedad de la misma durante el periodo que dura la Cuaresma. Es por ello que desde siglos atrás la población se preparara para afrontar estos días mediante jornadas marcadas por los excesos, comida y bebida a raudales que los fortalecerían para las jornadas de abstinencia.
En el caso concreto de nuestra ciudad, el primer encuentro carnavalesco tendría lugar en el año 1822 y como no podía ser de otro modo, la plaza de la Corredera se convertiría en el epicentro de los festejos. El estallido de la Guerra Civil traería consigo la prohibición del carnaval, pero desde la clandestinidad los más fieles lograrían que se mantuviera. Hasta que finalmente en los años 70 volverían a autorizarse, para que en 1983 tendría lugar el primer concurso de agrupaciones carnavalescas.
31 años después en muy pocos días, desde las butacas del Gran Teatro, esperamos seguir escuchando: ¡¡¡¡ESTO ES CARNAVAL, ESTO ES CARNAVAL!!!!
hola me gustaria enterarme cuando es el pasa calles de carnaval, y la ruta que tiene. Gracias