Iconografía

Como citamos en el apartado anterior, fueron varios los Obispos que intervinieron en las obras de realización del crucero, de hecho podemos apreciar sus escudos en diversos rincones del mismo. La iconografía del conjunto se encuentra estrechamente ligada con las distintas etapas del proyecto, y por lo tanto a cada Obispo.

Fray Juan Álvarez de Toledo (1523-1537) aportó la exquisita decoración de la bóveda del trasaltar, de autor desconocido, que presenta un programa iconográfico basado en los Profetas y las Virtudes. No de menos importancia son los relieves situados en los tímpanos de los arcos de herradura que integran el trasaltar, también anónimos, que representan cinco escenas de la Pasión de Jesucristo, destacando por su notable calidad compositiva. Los episodios narrados son: “El Prendimiento de Jesús en el Huerto de los Olivos“, “Camino del Calvario“, “La Crucifixión“, “El Descendimiento de la Cruz” y “La Resurrección“, donde hasta fondos son tratados con especial esmero por el artista.

Para Don Manuel Nieto Cumplido, el programa iconográfico realizado por Álvarez de Toledo en la bóveda del trasaltar lo culminaría Don Leopoldo de Austria con la decoración del deambulatorio de los pies del coro, es decir, al otro extremo de la Capilla Mayor. En este caso, se decoró la bóveda de crucería gótica con ocho figuras de virtudes de gran belleza y acertada composición.

De Don Leopoldo de Austria (1541-1557), además, podríamos resaltar varios frentes, pero destacaremos la decoración del arco de herradura de la nave axial situada a los pies del coro, contando con un total de veintidós figuras en hornacinas, coincidiendo con las diversas dovelas del arco. Más arriba, y embutidas en un arco de medio punto, encontramos varias esculturas, destacando “La Madre de Dios“, que entonces era titular del templo, bendecida por el “Padre Eterno“, ubicado sobre ella. A ambos lados se encuentran “David” e “Isaías” en actitud orante. Se piensa que el conjunto, por estilo y momento de ejecución, pudiera pertenecer a Hernán Ruiz II el Joven.

La bóveda de crucería gótica que cubre la Capilla Mayor fue también decorada en tiempos de Fray Juan Álvarez de Toledo. En ella gira todo en torno a la imagen central de “La Asunción de María“, mientras que en los cuatro tondos mayores se representan al Emperador Carlos I y tres santos. Luego encontramos hasta doce círculos de menores dimensiones en los que aparecen los apóstoles, y en las esquinas de las bóvedas, entre los nervios, varios ángeles músicos. Se trata de la representación de la Gloria de María, a la que se le añade al Emperador Carlos I de España, muerto años atrás.

El programa iconográfico y decorativo de la bóveda del coro fue, a buen seguro, establecido en tiempos del Obispo Francisco Reinoso, incluso podemos apreciar sus escudos entre las enjutas de los arcos del centro de la nave. En las enjutas se encuentran “Salomón“, “Daniel“, “Samuel” y “David“. En las medias enjutas de las esquinas las virtudes de la “Fe“, “Esperanza“, “Caridad” y “Fortaleza“. En la banda que divide en dos partes iguales la bóveda se halla, en su centro, “La Asunción de María“, junto a los santos “San Acisclo” y “Santa Victoria“.

La cúpula que cubre el crucero presenta un esquema iconográfico más sencillo aún. En las pechinas se representan a los cuatro evangelistas rodeados de ángeles y puttis alados. En la base de la bóveda, y alternándose con los espacios de luz, se encuentra las esculturas de los ocho Padres de la Iglesia: “San Ambrosio“, “San Jerónimo“, “San Agustín“, “San Gregorio“, “San Basilio el Grande“, “San Gregorio de Nacianzo“, “San Juan Crisóstomo” y “San Atanasio“, todo ellos labrados por el escultor Francisco Gutiérrez Garrido. Corona el conjunto “La Santísima Trinidad“.

Terminamos el análisis con el cerramiento del coro en su lado occidental, los denominados pies del coro. Aparecen las figuras de los cuatro Padres de la Iglesia enmarcados por columnas abalaustradas. El conjunto está rematado por diversas pinturas, de las que destaca “La Asunción de María” que presumiblemente sea obra del pintor Juan de Alfaro.

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Texto: J.A.S.C.